Poesías sin rima ni verso, cuentos para niños que no son para niños, ideas frustradas, y gritos silenciosos.

Tuesday, 23 October 2012

soldado

Sus ideas cambiaban con el viento, 
que era quien atraía el titilar de las monedas a sus oídos. 
Era un guerrero sin orgullo, 
sin patria por la que luchar. 
Sólo por dinero. En ocasiones por comida, 
en ocasiones gratis, 
pero solo en alguna de las muchas peleas de bar, 
en las que la lluvia de vasos y jarras es inevitable, 
y unos buenos nudillos sirven de escudo, 
espada y yelmo. 

Era un mercenario.
Peleaba guerras que no eran las suyas, 
ni de su incumbencia o interés. 
Peleaba sabiendo cómo su brazo podía romper el de otro, 
o cómo evitar un golpe que quizá fuera el último, 
no importaba saber la causa o la consecuencia. 
La verdad o la mentira. 
Solo su pago. 

Oscilante como una veleta, 
vendiéndose al mejor postor. 

No comments:

Post a Comment